El 18 de mayo de
1840 empezó el ejército mandado por el general Baldomero Espartero su ofensiva
contra Morella, ocupada por los carlistas. El 23 se disparó el primer cañonazo
contra el fuerte de San Pedro Mártir y el 25 la guarnición (264 voluntarios, 13
oficiales y un capellán), tras dos días de bombardeos, se vio obligada a
capitular. Los días 26 al 29, Morella sufrió un terrible bombardeo de cerca de
19.000 proyectiles lanzados contra la plaza. Una de las bombas cayó en un
almacén de municiones, causando un gran estallido que costó la muerte a más de
50 personas que estaban cerca del almacén, así como el derrumbamiento de
bastantes casas próximas.
A la vista de la
situación, el gobernador de la plaza Peret del Riu celebró una reunión en la
casa de Piquer con sus oficiales y las autoridades, acordando abandonar
sigilosamente la ciudad aquella misma noche, pero los sitiadores detectaron la
huida. El día 30, tras un infierno de cuatro días, los sitiados propusieron a
Espartero una honrosa capitulación, pero no la aceptó. Al final se rindieron
como prisioneros de guerra. Los liberales tomaron la ciudad, en la que hicieron
2.731 prisioneros.
Cruz de Morella (liberal). Las tropas de Isabel
II recibieron una condecoración con este nombre, por su victoria el 30 de mayo
de 1840 al conquistar la plaza. La leyenda dice: Egército Espedicionario del Norte; en el reverso figura una
granada de artillería y la inscripción Morella 30 de mayo de 1840.
El coronel Sixto Fajardo González, Gobernador
Militar interino de Peñíscola y Comandante Militar de Vinaroz durante la
Primera Guerra Carlista, consiguió dos Cruces de San Fernando de 1ª clase y fue
padre de cinco hijos, todos ellos Caballeros de San Fernando: Joaquín alcanzó
dos cruces y murió en combate siendo capitán; Luis logró una y murió de
mariscal de campo, al reprimir una sublevación en el castillo de Cartagena;
Ramón consiguió dos y ascendió a teniente general; Sixto obtuvo tres cruces y
alcanzó el empleo de brigadier, y, por último, Tomás recibió dos y llegó a
teniente general.
Salvador Zaragoza, Asesor; ocupó el cargo de Ayudante de Marina de
Vinaroz del 19-1-1840 al 1-3-1840 y del 7-11-1840 al 1-1-1841. Los asesores no
pertenecían a la Marina, pues solían ser abogados de la localidad contratados
para aconsejar a los Ayudantes de Marina. En ausencia del Ayudante ocupaban
provisionalmente su cargo. En la imagen, Vinaroz en 1654, según el Llibre
d’Aniversaris de l’Arxiprestal.
Antonio
de la Barrera Castro, Oficial de Artillería de Marina; fue Ayudante de Marina
de Vinaroz del 18-9-1840 al 20-9-1840.
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